Hace más de un mes que no escribo nada en el blog. Ha sido por un exceso de trabajo, lo cual es muy bueno en estos tiempos. Pero ya estoy aquí de nuevo.
Agata Ruiz de la Prada se ha decantado por los brillos, brillos y más brillos. Medias tupidas en colores chillones, sobre todo fucsia, que es un color que le encanta. Líneas trapecio y evasé, y sus corazones que nunca faltan.
Torreta ha presentado una colección muy femenina. Mucho satén en colores empolvados, y el uso de drapeados aunque yo diría que son caídas bien estudiadas de los tejidos. El resultado es estupendo.
La colección de David Delfín se llama “síndrome de Diógenes”, pero solo se vislumbra ese síndrome en la montaña de ropa que vemos al final de la pasarela. Toda su colección es absoluta sobriedad y absoluta limpieza. Muy de sastrería y en sus habituales colores grises combinados con blanco. Solo aparecen al final pocas salidas en verde profundo y azul intenso.
Sus prendas son todo en uno. Lo que parece una camisa más un chaleco más una chaqueta es una sola prenda donde todo va incorporado. Supongo que lo habrá pensado para no engordar a quien lo lleva, y por pura comodidad. Me pongo solo una cosa y parece que llevo tres.
Solo vi estos tres desfiles en televisión. Ni siquiera pude acercarme a Ifema. Es una pena que solo los televisaran por la mañana. Me gusta mucho Paloma Lago y los comentaristas que la acompañan.
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